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Dolor lumbar: ¿inespecífico?
- 23/07/2020
- Publicado por: Carlos Giménez Donoso
- Categoría: Cursos de formación

Iván Bennasar: hay que profundizar en las bases, no olvidar lo bio.
Los dos últimos fines de semana hemos estado profundizando en el manejo del dolor lumbar desde el ejercicio terapéutico con Iván Bennasar.
Ha habido tiempo para abrir debates de lo más interesantes. Compartimos con vosotros uno de los artículos que Iván nos ha recomendado para invitarnos a reflexionar sobre la etiqueta del dolor lumbar inespecífico: Discussion paper: what happened to the ‘bio’ in the bio-psycho-social model of low back pain? En este artículo, Hancock et al nos instan a no olvidar el componente bio en el dolor lumbar.
A estas alturas todos tenemos claro (o deberíamos tenerlo) la importancia y la relevancia de los factores psicosociales en el dolor lumbar. De hecho, dirigimos esfuerzos a diario para identificar estos factores y mejorar nuestro manejo de los mismos. Sin embargo, es posible que hayamos perdido interés en profundizar en el aspecto bio. No es justo para nuestros pacientes que nos escudemos en la etiqueta de inespecífico para no dejarnos la piel en perfilar al máximo posible el cuadro clínico que presenta nuestro paciente. Los que nos dedicamos a la clínica diaria sabemos que dentro de ese cajón de sastre de lo inespecífico se esconden patrones clínicos bien identificables que nos ayudan a diseñar estrategias terapéuticas individualizadas.
Durante el curso hemos tenido la oportunidad de valorar un caso clínico real de dolor lumbar de años de evolución en el que una anamnesis detallada, el conocimiento de la fisiología y la patología discal, una minuciosa interpretación de las pruebas de imagen y una exploración física rigurosa han puesto de manifiesto cómo el mundo de la disfunción se relaciona con la patología y cómo todo ello permite diseñar un plan terapéutico personalizado dirigido al control de la disfunción de movimiento predominante, mejorar las capacidades del tejido mediante exposición a las cargas y una correcta educación a la paciente sobre su problema. En estos pacientes no sirven los consejos generalistas del tipo “muévete más”, “no tengas miedo”, “entrena el core”, “ponte más fuerte”. Estos casos requieren de un plan metódico de trabajo con objetivos concretos.
Como dice Arturo Such, tenemos que ser muy buenos identificando la patología por muchos motivos, entre otros porque marca pronóstico.
Esperamos que disfrutéis del artículo, que aunque ya tiene sus añitos, creemos que sigue de plena actualidad. Cerramos la entrada con la última frase del mismo que nos parece que recoge muy bien la esencia del mensaje: “In his 1987 paper Gordon Waddell argued we must “develop a rational basis for choosing the most effective treatment for individual patients”. This is not possible without better understanding of the biological component of the biopsychosocial model”.
Este otoño volveremos a tener a Iván en Barcelona para seguir aprendiendo con un referente en el mundo de las disfunciones del movimiento y el ejercicio terapéutico.
Si quieres conocer un poquito más la visión de Iván Bennasar, te invitamos a ver una entrevista que tuvimos la oportunidad de hacerle durante el pasado confinamiento: Charlando con Iván Bennasar: dolor lumbar y mucho más.
Referencias:
– Hancock MJ, Maher CG, Laslett M, Hay E, Koes B. Discussion paper: what happened to the ‘bio’ in the bio-psycho-social model of low back pain?. Eur Spine J. 2011;20(12):2105-2110. doi:10.1007/s00586-011-1886-3
Estoy muy de acuerdo, y espero que reflexiones como éstas se empiecen a escuchar cada vez más alto. Creo que, como profesión, nos cuesta tomar las cosas con perspectiva: cada concepto que aparece lo colocamos en el centro, en lugar de utilizarlo para enfocar el problema desde distintos ángulos. Ahora le toca al modelo biopsicosocial: todo lo demás parece que ya no sirve. Somos capaces de analizar antes el contexto social del paciente que su movimiento. ¿Vamos a elegir qué ejercicios debe hacer cada uno según su código postal o su nivel económico?
Si pudiésemos, acabaríamos convirtiendo el modelo biopsicosocial en una técnica más de Fisioterapia.
Y todos esos mensajes generalistas relacionados con el ejercicio se están poniendo de moda, sencillamente, porque son fáciles de seguir para los fisioterapeutas. Es mucho más sencillo decirle a un paciente “muévete más” o “ponte fuerte” que hacer todo ese proceso de análisis y razonamiento. Pero también tiene sus peligros: el primero, que el paciente no vea el valor real que tiene el ejercicio terapéutico bien administrado. Y el segundo: que para hacer ejercicio de esa manera no hace falta un fisioterapeuta.
Gracias por el comentario, Nerea. Tienes toda la razón en la facilidad que tenemos que para llevarnos por modas. Todo nuevo conocimiento suma, pero el nuevo conocimiento tiene que asentarse sobre unas cimientos firmes en biología, fisiología, anatomía y patología. Sin esos cimientos, navegamos a la deriva. Saludos.